¿Te has preguntado alguna vez cómo el simple hecho de no contar con un sistema o control de inventarios correcto puede disminuir la eficiencia y productividad de tu empresa e incluso llegar a afectar negativamente la relación que manejas con tus clientes? El éxito empresarial hoy en día depende de muchos factores; no obstante, la mayoría de ellos giran en torno a la necesidad vital que tienen los empresarios de garantizar que todos sus procesos se ejecutan de manera óptima y adecuada, incluyendo, por supuesto, la operación logística.
En Recilock deseamos que tu compañía alcance las metas de crecimiento propuestas para el área logística y de almacenamiento, por ello, hemos decidido destinar esta nota a explicarte qué es el control de los inventarios, qué papel cumple al interior de las organizaciones, cuáles son sus diferentes tipos y de qué manera esta herramienta puede mejorar la eficiencia en tu operación. ¡No pares de leer!
¿Qué es un sistema o control de inventario?
El sistema de inventarios hace referencia al conjunto de herramientas, procesos y criterios que las empresas emplean para planificar, organizar y mantener un control efectivo de su stock de productos, materias primas, y demás objetos que hacen parte de su operación. Para asegurarse de que su sistema de control de bodega es funcional y útil para su organización y para sus colaboradores, actualmente los empresarios han optado por utilizar un mobiliario que garantice mayor visibilidad, de modo que los operarios puedan ejecutar su control de inventario de manera más fácil y rápida. Por ejemplo, entre las alternativas más usadas en las bodegas están las cajas logísticas, las repisas, las estanterías, etc.,
Las ventajas que brinda un efectivo sistema de inventarios giran en torno especialmente al aspecto económico, debido a que permiten reducir costos y pérdidas de materiales o bienes; disminuir la aparición de problemáticas relacionadas con la falta de suministros para producir, o retrasos en las entregas de los productos a los clientes, incluso, pueden evitar o ayudar a corregir en menor tiempo situaciones molestas como robo de materiales o una mala gestión logística por parte del personal.
A diferencia de lo que muchos opinan, el sistema de inventarios no se limita únicamente a gestionar y controlar los niveles de existencias de los productos que la compañía comercializa, ya que también es el método más útil y práctico mediante el que la organización puede llevar un control sobre el gasto y reabastecimiento de los suministros que utiliza en su producción. Ahora bien, si deseas saber si tu sistema de control logra cumplir eficientemente con su función, debes asegurarte de que su diseño abarque tres aspectos específicos:
- Control efectivo de la mercancía y suministros.
- Rastreo y registro de todos y cada uno de los movimientos que se realizan en la bodega (gestión logística).
- Diseño y planificación de protocolos de seguridad industrial para la prevención de accidentes.
¿Cuáles son los tipos de control de inventario más usados?
Pasemos ahora a explicarte a grandes rasgos los distintos métodos para la gestión de inventarios en un almacén que actualmente son aplicados. En general, los más famosos son tres: Método FIFO, método LIFO y método de gestión ABC. Para que puedas adoptar la opción que mejor se adapte a tus necesidades, a continuación te explicamos de qué se compone cada uno:
- Método FIFO: las siglas “FIFO” significan first in, first out, y, como su nombre lo indica, ejecutando este sistema, las primeras materias primas o productos en entrar y ser almacenados en las estanterías metálicas de tu bodega, son los primeros en salir para su distribución y uso. Sus ventajas tienen relación con el hecho de que garantizan un alto nivel de rotación, lo que lo convierte en el método más adecuado para las empresas que manejan productos perecederos como farmacéuticas, industrias de alimentos, cosméticos, entre otros.
- Método LIFO: las siglas “LIFO” se traducen como last in, first out y, a diferencia del anterior método, en este caso, las primeras mercancías y materias primas que salen para su comercialización y empleo, son las que han sido almacenadas de últimas. Es decir, las primeras en entrar a tu bodega, son las primeras en salir. Este curioso método es perfecto solamente para las compañías que manejan productos y materiales que no tienen una fecha próxima de vencimiento como ropa, muebles, artículos de merchandising, etc.
- Método de gestión ABC: este último método es un poco más complejo, ya que divide la mercancía y objetos de tu bodega en tres categorías específicas:
- Categoría A: este conjunto generalmente ocupa el 20% de todo el stock del almacén y engloba los productos que, por ser más costosos, necesitan de un mayor control, motivo que lleva a ubicarlos en las zonas de mejor acceso en la estantería.
- Categoría B: en este grupo, los materiales y productos son de menor valor en comparación con los de la categoría A, y requieren menos vigilancia, gracias a que su nivel de rotación es más bajo y su control de inventario se ejecuta por lotes y no por unidades. Suele ocupar una posición media alta en la estantería y representan el 30% del stock.
- Categoría C: a este último conjunto hacen parte el 50% de toda la mercancía que se almacena en la bodega. Su porcentaje de rotación y nivel de control es sumamente bajo, por lo que, en las repisas para bodegas, suelen estar ubicados en las partes más altas.
Ya que conoces qué es, qué papel cumple y cuáles son los diferentes tipos de control de inventarios, ¿estás listo para adoptar en tu empresa el método que te brinde mejores resultados en términos económicos y productivos? Recuerda que, en pro del éxito empresarial, debes garantizar la eficiencia en todos tus procesos, por lo que, ¡no lo dudes más! Comienza ya asegurando la mejor operación logística con el sistema adecuado y el mobiliario correcto que solo Recilock te ofrece.
Artículo tomado de Comercializadora y Distribuidora
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